¿Quién es el Capo de provincia?

La hinchada de O”Higgins hace ya tiempo habla de su equipo como el Capo de provincia, término que ya ha trascendido incluso a los comentarios deportivos de televisión. Es por esto que nos cabe la siguiente pregunta ¿Cuál es el equipo más grande de provincia?
Para poder sacar una conclusión hay distintos factores que entran en discusión, como títulos, fortaleza de la institución y convocatoria de público entre otros.
El primer equipo que podría caer en esta categoría es Iquique, joven club fundado en 1978, ya en 1980 lograba su primer título al ser campeón de la Copa Chile. Es el equipo de provincia de mejor asistencia promedio en el actual campeonato de Primera A con 6.441 espectadores ( 3,9 % del total de la población comunal).
Más al sur nos encontramos con el más exitoso equipo fuera de Santiago, Cobreloa. Con 8 títulos nacionales una Copa Chile y dos finales de Copa Libertadores, no tiene equipo de provincia que iguale sus logros, además de tener un importante número de hinchas a lo largo del país. Lamentablemente dirigentes de dudosa capacidad organizativa, escaso público en la cancha y un estadio de tercera categoría, no van acorde a un equipo tan triunfador.
Del norte grande pegamos un salto a la cuarta región, más específicamente a Coquimbo, el cuadro pirata tiene la hinchada más antigua de provincia, “Al Hueso Pirata”, la que posee un alto nivel de organización. Un dato importante es el apoyo popular. Estando en Primera B, Coquimbo Unido es el equipo de provincia con la mejor asistencia en todas las categorías del fútbol chileno, con un promedio de 7.247 asistentes ( 3,5% del total de la población comunal) muy meritorio hoy, porque el equipo no ha tenido la campaña que se esperaba. En lo deportivo, muy poco, una participación en la Copa Libertadores de 1992, eliminados en primera ronda.
En la Quinta Región tenemos a dos vecinos que no se llevan muy bien.
En Viña del Mar, Everton. Con cuatro títulos nacionales (el último en 2008) y una Copa Chile en 1984, ha sabido ser protagonista este último tiempo, pero a pesar de los buenos resultados y el buen manejo digirencial, el apoyo en la cancha no ha sido suficiente. El 29 de abril pasado jugaron con las Chivas el que para el presidente ruletero Antonio Bloise era el partido más importante en la historia del club. No se llenó Sausalito, sólo fueron 11.884 personas. Su archienemigo Wanderers, el equipo profesional más antiguo de Chile (f. 1892) vive hace tiempo el otro lado de la moneda, con una crisis institucional que terminó por condenarlo al descenso el 25 de noviembre de 2007. Entre sus logros destacan tres títulos nacionales (el último en 2001) y dos Copa Chile. Cabe destacar que el campeonato logrado el año 2001, 50 mil personas lo vieron celebrar el título frente a Audax como visitante en el Estadio Nacional, la gran mayoría de ellos llegados desde Valparaíso. Actualmente es después de Coquimbo, el equipo de provincia con mayor apoyo en la cancha, con un promedio de público de 6.509 personas.
En la sexta región nos encontramos con O”Higgins, equipo no sólo en el corazón de los rancagüinos sino también de los habitantes de pueblos aledaños como Graneros, Machalí y Requinoa por nombrar algunos.
La hinchada celeste es reconocida por su apoyo al equipo, capaz de seguirlo en buen número a distintas canchas del país. El promedio de público en el Apertura 2009 es de 5.823 personas, poco para hinchas tan fanáticos como los rancagüinos.
Tienen como presidente a Ricardo Abumohor, uno de los dirigentes con más experiencia del fútbol chileno, pero lamentablemente los resultados no llegan. Desde 1955 (año de su fundación) O”Higgins tiene nulos logros deportivos (sólo un campeonato de primera B en 1964)
El equipo más austral de esta lista es Temuco, quien está inmerso en una grave crisis deportiva que lo tiene jugando en Tercera División. Esto no ha amilanado a su gente, que históricamente a acompañado al equipo sureño, son ellos los que han hecho del equipo albiverde el más grande del sur, porque las gestiones dirigenciales han llevado al club a la ruina.
Queda claro que en el fútbol chileno no abundan grandes instituciones, ni mucho menos importantes logros deportivos (salvo los locales) siendo la gente la que hace grande a su equipo, entiéndase por esto: nivel de convocatoria, de organización, de fanatismo, de identificación.
Ninguno de estos equipos podría considerarse grande en este momento, pero si a la pasión que ponen sus hinchas (lamentablemente sin grandes asistencias a los estadios) se le suman los resultados deportivos y las buenas decisiones dirigenciales, podrían llegar a serlo.
Por lo que significa para el fútbol chileno, por como viven el fútbol, por la ciudad que representan y porque tiene un potencial enorme para ser grandes, el capo de provincia sin duda es Wanderers de Valparaíso y una mención especial para los éxitos deportivos de los loínos, el fanatismo de los hinchas piratas y rancagüinos y para el enclave de pasión sureña de los temuquenses.